EL CRITICO RAY
Raymundo Martín Gomez
Aprovechando que era el paso obligado para los habitantes del oriente y
noreste de Yucatan, Cansahcab pudo tener un mejor desarrollo y crecimiento en
beneficio de su pueblo desde hace décadas pero parece que los políticos no lo
entendieron así incluso ahora en que a simple vista se nota cierto crecimiento
pero también hay mucho por hacer.
Quienes venían (o iban) de Tizimín y los pueblos del oriente o los que
procedían de Dzilam Bravo, Dzilam González o Dzidzantún tenían que atravesar
Cansahcab antes de que el entonces gobernador Víctor Cervera Pacheco creara,
ampliara, en forma la carretera a Tizimín que hizo el libramiento.
Esta tierra merecía un mejor destino no sólo porque en su suelo nació
gente valiosa e importante como el maestro, exquisito poeta y defensor del
costumbrismo yucateco don Víctor M. Martínez Herrera, padre de nuestro siempre
querido y recordado periodista y poeta José Martínez Novelo (ambos que en paz
descansen), dueño y director del periódico vespertirno El Diario Gráfico, en
Mérida, quien a varios yucatecos nos dio la oportunidad de iniciarnos en el
periodismo.
O de mi maestro en la universidad de la vida y el trabajo, don Nemesio
Sánchez, un bohemio, versátil comerciante, que llegó a tener su popular
coctelería "El Caracol" en la céntrica calle 62 con 63 de Mérida (a
media esquina del Palacio Municipal), quien pese a no haber terminado su
educación primaria en Cansahcab era tan inteligente que un día también le
dedicaré una entrega especial.
Por su gente valiosa y su historia que va desde el paso de la conquista
española, los frailes franciscanos que crearon el convento y otros pasajes no
muy conocidos por las actuales generaciones, Cansahcab merecía crecer más pues
durante el auge del henequén allá por los años sesenta era sitio de referencia
para los campesinos henequeneros al tener la sucursal del banco mejor
identificado como BANRURAL que obligaba al viaje continuo de comisariados
ejidales de esa zona.
Si antes no se hizo, en los sesentas con el boom henequero era el
momento para provocar el crecimiento más acelerado, ordenado pero, ¿faltaron
políticos visionarios o sus hijos predilectos que salieron a triunfar en Mérida
no regresaron a aportarle su talento al pueblo que los vio nacer?
Algo pasó pero tal vez se está a tiempo de aprovechar todas las
experiencias del pasado que va desde la época de los mayas pertenecientes a la
jurisdicción de los Ah Kin Chel antes de la conquista de Yucatán, hasta ahora
para proyectar a este gran pueblo ubicado apenas a 52 Kms de Mérida.
Los espíritus de gente importante como el poeta y cronista de la
canción yucateca, don Víctor M. Martínez y don Nemesio Sánchez o de quienes
aportaron su talento para con Yucatán así lo exigen pero en otra dimensión pero
más que nada lo requieren las actuales y futuras generaciones.
Incluso es importante saber que Cansahcab significa en lengua maya el
lugar de las 4 cuevas de tierra blanca, por derivarse de las voces, can, 4 y
sahcab, tierra blanca, algo que muchos nativos de la región no lo sabíamos, de
no ser porque con las nuevas tecnologías hoy tenemos a mano la información.
No se trata de que Cansahcab u otros pueblos tengan una imagen menos
triste, opaca ni decadente pero, ¿no hay políticos locales talentosos,
visionarios o creativos para impulsar más el arte, la cultura u otras
actividades que proyecten más a este querido pueblo (FOTO INCLUIDA DEL PALACIO
MUNICIPAL) y su gente? Tienen la respuesta el alcalde, los regidores y las fuerza
vivas.- Raymundo Martín Gómez, Chetumal, Q. Roo
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