La importancia de Dzidzantún para los pueblos del noreste de Yucatán

EL CRITICO RAY

La importancia de Dzidzantún para los pueblos del noreste de Yucatán


Por muchas razones, Dzidzantún fue durante muchos años un punto vital para los habitantes del noreste de Yucatán porque ofrecía lo que era imposible encontrar en la región: servicios médicos, de farmacia, educativos, de transporte... Y lo sigue siendo, aunque en menor medida.

Quién en los años cincuenta o sesenta no conocía al amable y eficiente Dr. Pérez, que atendía a los habitantes de Dzilam González, de Temax y demás pueblos incluso de Buctzotz, en casi cualquier enfermedad, que incluía los derivados de algún accidente, pues en la región no habían médicos, clínicas y menos hospitales.

Su farmacia adjunta también era la única al grado de que en bicicleta nos mandaban de Dzilam González a comprar las medicinas de "Magnopyrol" para mamá, y de paso recorrer algunas calles alrededor de su amplio, arbolado, parque que para esas fechas lucía un poco descuidado.

O cómo olvidar los juegos de béisbol entre los eternos rivales, los Diablos de la Costa y el equipo dzilameño que patrocinaba el Ayuntamiento (cuyo alcalde en lugar de dedicarse a gestionar o pavimentar calles pagaba los gastos beisboleros), que eran una fiesta cada domingo por el alto nivel de competencia entre ambos equipos.

Y qué decir de los maestros que venía o vivían en Dzidzantún para viajar todos los días y ofrecer sus servicios a los pueblos circunvecinos pues los dzilameños no teníamos ningún profesor en funciones pues el maestro Délmer Peraza (q.e.p.d.) vivía y daba clases en Mérida además de trabajar en sus ratos libres en el Diario de Yucatán.

La "Maestra Pituca" y su esposo el Profr. Ricalde fueron algunos de los mentores que tuvimos en los sesenta en la única escuela primaria estatal de la época, la "Salvador Alvarado", ya que el maestro don Jacinto Rosado sólo atendía en su casa a algunos chicos y chicas cuyos padres podían pagar su respectiva colegiatura, no nosotros los pobres.

Otro gran referente era el transporte porque resultaba más fácil conseguir el servicio de taxi colectivo o autobús a Motul, Mérida o pueblos circunvecinos incluso porque la llamada "Sultana", marca del camión, salía de noche todos los días para llegar a Dzidzantún... y de ahí buscar un aventón hasta Dzilam.

También era la vía para llegar a Santa Clara, un balneario fabuloso, pues el camino costero desde Dzilam Bravo no estaba en muy buenas condiciones incluso cuando lo pavimentaron ya que apenas medía cuatro metros de ancho.

Hace algunos años cuando crearon en forma la carretera Mérida-Tizimín y surgieron los libramientos de Cansahcab y Temax, la comunicación terrestre a Dzidzantún disminuyó pero no así su importancia. Aunque también ha tenido alternancia entre los partidos políticos PAN y PRI, presenta otra visión para propios y extraños.

Desde hace años hay más servicios médicos y de salud públicos y privados en casi todos los pueblos de la región, hoy los maestros incluso de Dzilam tienen que trasladarse a otros pueblos para impartir sus clases diarias, la comunicación por autobuses o camionetas Van aumentaron, pero no porque en la región han surgido prominentes políticos ni eficaces funcionarios que hicieron las gestiones, sino como parte del crecimiento normal.

Por supuesto quienes tenemos singulares anécdotas siempre recordamos a Dzidzantún. A unos pasos del Palacio Municipal (FOTO INCLUIDA) nos parábamos a esperar en la noche del sábado que algún conductor piadoso nos diera un aventón para llegar a Dzilam pues la famosa "Sultana" hasta allá llegaba. Ese es otro aspecto de su importancia para nosotros, los migrantes.- Raymundo Martín Gómez, Chetumal, Q. Roo